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La leche es un pilar fundamental en la alimentación diaria, ofreciendo nutrientes esenciales como calcio, proteínas y vitaminas. Sin embargo, no todas las leches son iguales. Existen diferentes tipos de leche que se adaptan a diversas necesidades y preferencias. Proleche te ayudará a elegir la mejor opción para ti y tu familia.
La leche entera Proleche conserva toda su grasa natural, aproximadamente un 3.0%. Es rica y cremosa, ideal para quienes buscan un sabor más completo.
La leche semidescremada tiene un contenido de grasa reducido, generalmente entre 1.5% y 2%. Es un punto medio entre la leche entera y la descremada.
La leche descremada o desnatada, contiene menos del 0.5% de grasa, siendo prácticamente libre de grasa y baja en calorías.
La leche deslactosada ha sido tratada con lactasa, una enzima que descompone la lactosa en glucosa y galactosa, facilitando su digestión para personas con intolerancia a la lactosa.
La elección del tipo de leche adecuado depende de tus necesidades nutricionales, preferencias de sabor y consideraciones de salud. Aquí algunas pautas para ayudarte:
